El nuevo mapa político nacional se tiñe de rosa

“Cuando la gente suele atribuir intuición a las mujeres como virtud misteriosa, no se acuerdan que nosotras tenemos que ver las cosas, las personas y la vida de una manera especial. En nosotras, la inteligencia se desarrolla a la sombra del corazón”, escribió Eva Perón en el libro “La razón de mi vida”. Las palabras de esta referente política femenina hacen alusión a un fenómeno que está vigente en la actualidad: las capacidades intelectuales de las mujeres se están ampliando a diferentes ámbitos, del cual el político no es la excepción.

Pareciera que el antiguo mito que caracteriza al género femenino por su desinterés del poder político ha comenzado a desmoronarse. A las virtudes características de la mujer, se le suman las que hasta hace un tiempo atrás eran sólo propias del hombre: activo, fuerte, emprendedor.

El nuevo mapa político de La Argentina presenta esta idea como una realidad, ya que hoy como exponente máximo se encuentra una mujer. En las elecciones presidenciales del pasado 28 de octubre Cristina Fernández de Kirchner se consolidó, con el 44,8% de los votos, como Presidenta de los argentinos. En sus primeras declaraciones como presidenta electa se refirió al doble compromiso que enfrentan las mujeres en los tiempos que corren.

Pero no sólo hay una mujer al frente del oficialismo, también la oposición, o la segunda fuerza política del país, tiene como mayor exponente a una mujer. Elisa Carrió desde su partido, La Coalición Cívica, logró posicionarse en el segundo lugar con el 22,9% de los votos logrando excelentes resultados en diferentes centros urbanos del país, incluida Capital Federal. En sus declaraciones posteriores al escrutinio provisorio, dejó en claro la posición de su partido.



Esta nueva composición de la política argentina lleva a juzgar y replantear muchos aspectos relacionados a la mujer y el poder. Proyint te invita a ver una encuesta realizada por Clarin.com previa a las elecciones dónde ya se juzgan estos aspectos.

Desde hace un par de años se viene cuestionando la incursión de la mujer en campos que antes sólo ocupaban los hombres. A continuación analizaremos la situación en el interior de Córdoba, si el siglo XXI es el siglo de la mujer, y cómo se logra este cambio social.